Bandolera realizada con fular Girasol, perfecta por soporte y suavidad.
La bandolera es uno de los portabebés más utilizados por su facilidad de uso. Se compone de una tela de unos 70 cm de ancho por 2 metros de largo, preferiblemente en tejidos naturales (lino, algodón, seda…) con un par de anillas cosidas en un extremo. Es un portabebé recomendado desde el nacimiento y hasta que el bebé o niño o sus porteadores quieran utilizarlo. Se caracteriza por su colocación en un sólo hombro, aunque la tela queda extendida por la espalda y el peso se reparte por toda ella, pero no de modo tan uniforme como con otros portabebés de dos hombros. La bandolera es especialmente práctica para amamantar, para portear durante el verano y en zonas calurosas y para las épocas en las que los niños ya caminan y quieren subir y bajar del portabebé a menudo.
Utilizamos anillas especialmente diseñadas para uso en portabebés, ligeras y resistentes, confeccionadas en aluminio de una sola pieza.
En cualquiera bandolera puedes elegir tanto el color de las anillas (si no indicas tu preferencia pondremos unas a juego) como el plegado para el hombro (por defecto llevan plegado simple o tipo Sakura).
Todas nuestras bandoleras llevan instrucciones de conservación y de uso con fotografías paso a paso.